Las dietas blandas, si bién pueden ser adecuadas en términos nutricionales, conducen a la formación de placa bacteriana y cálculos dentales. Los alimentos duros y fibrosos permiten una acción de limpieza y estimulación del sistema estomatológico que redundará en menor formación de placa bacteriana, enfermedad gingival ,caries y ayudando positivamente en un buen desarrollo de los maxilares.
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